Contigo quiero todo y nada a medias. Un ... es lo más vacío y frio que jamás haya sentido. Fui un tonto al crearme ilusiones y al caer en un estado paranoico de letargo mágico que me impedía ver la realidad
Francamente, fui un tonto al pensar que a futuro podría robarte el corazón. Ahora me doy cuenta en que esto no sucederá y que debo tomar otro camino, me duele mucho esto, pero has roto tu promesa y no has sido sincera conmigo. Tu filosofía siempre ha sido una estupidez para mí, pero yo siempre estuve dispuesto a todo por ti, a comprender la razón de tu actitud y así poder entenderte. En cambio tú mostraste una actitud de miedo e indiferencia. Nunca pensé en lastimarte, al contrario, yo siento algo muy lindo por ti que me impide lastimarte y abusar de tu situación, lo cual parece ser insuficiente para ti.
No lo entiendo y tal vez nunca lo entenderé, pero no puedo estar de insistente toda la vida. Tampoco puedo ceder a cada uno de tus caprichos y a tu estado tan cambiante. Poco a poco fuiste matando mis pasiones, me tenías pisoteado con tu actitud de desdén. Y esto me tenía desahuciado. No tienes corazón y ya no te vuelvo a amar. Somos seres humanos y se lo mucho que te dolió romper tu ultima relación y te dije que una infidelidad tuya me rompería el corazón en añicos, aunque esto fuese una “No relación”. Te lo hice saber, pero por lo visto no te importó en absoluto. Sin embargo, yo te perdono, no hay rencores, solo errores que evidencian mi inmadurez. Mi alma esta ya dañada y ahora llora en suelo mojado, lo cual siempre ha sido inevitable.
En momentos como este de tanto dolor, como quisiera poder vivir sin ti, poder vivir sin tus encantadores ojos, sin tus dulces labios. De igual manera, me encantaría quererte un poco menos y lanzarte al olvido con tal de ser libre una vez más, así como, borrarte de un soplido, y así calmar esta aflicción. Sin embargo, aún me encantaría robar tu corazón.
Lamento decirte esto, pero tú eres la culpable, quien me ha arrancado los sueños hoy, quien me arrodillo para humillarme, quien enjauló mi alma y quien sangro mis labios.
Esta pena duele y quema sin tu amor. Tal vez aún me muero por ti, pero tarde o temprano aprenderé a vivir sin ti. Aunque en este momento me duele tanto estar así.
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