domingo, 21 de marzo de 2010

Mario benedetti.


En ciertos oasis el desierto es sólo un espejismo.


Oasis



Un sociólogo norteamericano dijo hace más de treinta años que la propaganda era una formidable vendedora de sueños, pero resulta que yo no quiero que me vendan sueños ajenos, si no sencillamente que se cumplan los míos.

Propaganda



Yo no sé si dios existe, pero si existe, sé que no le va a molestar mi duda.

Dios



Cinco minutos bastan para soñar toda una vida, así de relativo es el tiempo.

Tiempo



Pasan misiles ahítos de barbarie globalizados.

Guerra



Después de todo la muerte es sólo un síntoma de que hubo vida.

Muerte



Los sentimientos son inocentes como las armas blancas.

Sentimientos



La mariposa recordará por siempre que fue gusano.

Mariposa



Hay pocas cosas tan ensordecedoras como el silencio.

Silencio



Cada suicida sabe dónde le aprieta la incertidumbre.

Incertidumbre



No hay alegría más alegre que el prólogo de la alegría.

Alegría



No sé tu nombre, sólo sé la mirada con que me lo dices.

Nombre


Mario Benedetti.

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